Una golosina (de goloso, y éste del latín gulōsus) es un manjar generalmente dulce, cuyo único valor nutritivo es el azúcar (u otros carbohidratos) o grasa, escaso o nulo en proteínas, vitaminas y minerales, y está destinado a satisfacer un gusto o antojo.
Su consumo en exceso es un mal hábito que se ha extendido principalmente en los niños, y puede desencadenar problemas de salud como obesidad, diabetes, caries e incluso anemia, debido a que rara vez aporta hierro y ocasiona pérdida de apetito por alimentos nutritivos.
Una chuchería, chuche o galguería es una forma más coloquial de designar a las golosinas.
También existen golosinas dietéticas a base de edulcorantes como la sucralosa o stevia rebaudiana, las cuales están especialmente elaboradas para personas en régimen pero aun así siguen teniendo una cantidad de azúcar perjudicial para los diabéticos u otras personas que intenten adelgazar.